![](https://cdn.shopify.com/s/files/1/0618/6762/2557/files/blog-5_600x600.png?v=1672286415)
Ingredientes:
Para la mezcla seca:
- 400 g de copos de avena
- 50 g de coco desecado
- 80 g de pipas de girasol
- 80 g de semillas de calabaza
- 15 g de semillas de chía
- 10 g de semillas de lino dorado molidas
- 20 g de semillas de lino doradas enteras
- 80 g de almendras o cacahuetes (opcional, omitirlo para una versión sin frutos secos)
Para la mezcla húmeda:
- 110 g (5,5 cucharadas) de jarabe de yacón La Ecohuerta
- 50 g de plátanos maduros
- 50 g de dátiles
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1⁄2 cucharadita de canela de Ceilán
- 1⁄2 cucharadita de especias de calabaza
- 50 g de mantequilla de almendras o de cacahuete (opcional, omitirla para una versión sin frutos secos nueces)
Para añadir al final:
- 1⁄2 taza de pasas.
- 1⁄4 taza de moras deshidratadas
- 1⁄4 taza de arándanos rojos deshidratados
- 1⁄4 taza de bayas de goji
Preparación:
1. Empieza tostando la avena. Ponga la avena en una cacerola o sartén y tuéstela en seco durante 5-10 minutos hasta que adquiera un color dorado.
2. Pasar la avena a un bol grande. Utilice la misma sartén para tostar en seco el coco seco 1-2 minutos.
3. Añadir el coco tostado y el resto de los ingredientes secos al bol de mezcla y déjelo a un lado.
4. Mezclar todos los ingredientes húmedos hasta obtener una pasta.
5. Pasar la pasta al bol con los ingredientes secos y mezclar bien con una cuchara grande.
6. Extienda la mezcla de granola resultante en 2-3 placas deshidratador durante 8-10 horas. Cuando la parte superior esté secas, retire las hojas del deshidratador y continúe deshidratando la granola en las mallas del deshidratador durante otras horas hasta que esté completamente seca y crujiente.
7. Cuando la granola esté seca, añadir los frutos secos y mezclar bien.
8. Transfiera la granola a un recipiente hermético y guárdela a temperatura ambiente hasta 3 meses.
© Paulina Nienartowicz, vegan chef
La granola casera e integral es una gran alternativa a los cereales y granolas comprados en la tienda, cargados de azúcar y aceite. Puede comerse con leche vegetal y yogur de coco o utilizarse en batidos.